Epístola de Segunda de Pedro I
Fred R. Coulter—8 de septiembre, 1995
Segunda de Pedro fue escrita a causa de muchos de los mismos problemas que ya estaban más desarrollados en las Epístolas de 1era, 2nda y 3era de Juan. Había muchas dificultades y muchos problemas, como herejías. Podría decir que hemos vivido muchas de esas cosas últimamente. Hagamos un resumen general de II Pedro y veamos un principio que siempre es aplicable: Antes de que Dios hable acerca de la corrección, de los problemas y las dificultades, Él siempre enfoca nuestra mente en las cosas importantes acerca de Cristo. Eso es lo que Pedro hizo aquí en el primer capítulo.
II Pedro 2:1 nos dice lo que estaban haciendo: “Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como en verdad habrán falsos maestros entre ustedes, que sigilosamente introducirán herejías destructivas…” ¿No son esas herejías destructivas? ¡Sí! Claro que, esto fue escrito después de que Pedro verificó la Verdad y el poder de la Palabra de Dios (en la última parte de II Pedro 1, él explica que lo que estaban predicando no estaba basado en fabulas inventadas ingeniosamente.) Estoy seguro de que nosotros hemos leído muchas de esas últimamente.
“[Ellos estaban] negando personalmente al Señor que los compró… [Lo cual significa que esto es algo que ellos mismos estaban iniciando, pero que al hacerlo también tenía un efecto en otras personas]…negando personalmente al Señor que los compró, y trayendo rápida destrucción sobre sí mismos” (verso 1). Sabemos que muchas personas en la actualidad van a seguir lo que ellos estaban haciendo.
Ahora, el verso 10 nos revela su actitud: “Pero particularmente a aquellos que caminan tras la carne…” Y tal vez quieran poner en sus notas Romanos 8, que habla sobre la ‘mente carnal.’ Téngalo en mente, si usted está caminando tras la carne y preocupándose por las cosas de la carne.
“…en lujuria corrupta… [Dejando que la lujuria los domine]… y mantienen en total desprecio el señorío de Dios…” (Verso 10)—sobre sus vidas. Las palabras en itálicas son lo que he insertado para dar una definición de las palabras, por ejemplo: es el señorío.
“… [Ellos están] en total desprecio el señorío de Dios [sobre sus vidas]. Ellos son audaces y voluntariosos. No tienen temor de blasfemar los poderes divinos [ángeles]” (verso 10).
Verso 12: “Pero estos—como bestias brutas irracionales, nacidas para ser atrapadas y destruidas—blasfeman aquellas cosas de las cuales son ignorantes, y serán absolutamente destruidos en su propia corrupción.” Podemos mirar a nuestro alrededor y mirar a través de la historia, y darnos cuenta de que eso es absolutamente cierto en la actualidad. II Pedro 3—aquí hay otra cosa que ellos también están haciendo además de rechazar a Dios; se burlaban. Hay personas en la Iglesia de Dios que han dicho, ‘Usted no tiene que leer el libro de Apocalipsis, porque es muy confuso y en realidad no deberíamos siquiera estudiarlo ni hacer algo al respecto. Lo que sea que está ahí, ya se ha cumplido y no tiene ningún significado para nosotros ahora.’ Esas son las personas que se burlan.
II Pedro 3:3: “Sabiendo esto primero, que en los últimos días vendrán burladores, caminando de acuerdo a sus propias lujurias personales, y preguntando, “¿Dónde está la promesa de Su venida?... [La mayoría de las personas no piensan que Cristo va a regresar— y desafortunadamente, esto es algo que podemos ver cada vez más en algunas de las Iglesias de Dios]…Porque desde que los antepasados murieron, todo ha permanecido igual como desde el principio de la creación” (versos 3-4). Esto muestra la actitud de las personas.
II Pedro 2:13 expone su inmoralidad y lo que están haciendo: “Ellos están trayendo sobre sí mismos la recompensa de injusticia, mientras hallan placer en satisfacer sus deseos lujuriosos día a día… [Y esto tiene que ver con todo tipo de libertinajes, incluyendo libertinajes sexuales]… Son manchas e imperfecciones, deleitándose en sus propios engaños, mientras festejan junto con ustedes. Teniendo ojos llenos de adulterio y que no pueden cesar del pecado…” (Versos 13-14). Entre otras cosas.
Así que, este era el tipo de personas que Pedro tenía que enfrentar. Y ¿Qué sucede cuando se tiene ese tipo de actitud? Volvamos al verso 2 del capítulo 2: “Y mucha gente seguirá sus caminos destructivos… [Porque usted no va a seguir nada, a menos que crea que está en autoridad]…y a causa de ellos, el camino de la verdad será blasfemado.” Nosotros hemos estado viendo eso en la actualidad, ¿No es así?
Volvamos a II Pedro 1:1, y veamos algunas cosas interesantes acerca del comienzo de todo esto. Lo que me gustaría que hicieran es que tomen sus Biblias, que las abran en I Pedro 1, y que comparemos este capítulo con II Pedro 1. Vamos a ver que es un poco distinto— y por qué es distinto.
II Pedro 1:1: “Simón Pedro, un siervo y un apóstol de Jesucristo…” Eso es un poco distinto a I Pedro 1:1 donde dice, “Pedro, un apóstol de Jesucristo…” ¿Pudiera ser que habían otros diciendo que eran Pedro, y que él quería asegurarse de que ellos supieran que él era Simón Pedro, al que Jesús había escogido? ¡Yo pienso que sí es una posibilidad!
Noten la siguiente frase, “…un siervo…” En I Pedro 1:1 solamente dice “…un apóstol de Jesucristo…” Pero aquí, él dice: “…un siervo y un apóstol…” (Verso 1). Yo pienso que esto muestra que él aprendió la lección de Mateo 20: ‘que aquel que quiera ser el mayor entre ustedes, sea el que sirva, el que ayude, el que haga’—no solamente se trata de ser un apóstol. Recuerden que Pedro tuvo que ser reprendido abiertamente por el apóstol Pablo, cuando se separó a si mismo de los gentiles en Gálatas 2—aunque no entraremos en eso hoy, porque hay muchos aspectos detrás de ese asunto. Pero Pedro tropezó bastante en ese asunto en particular.
Ahora vayamos a I Pedro capitulo cinco. Yo pienso que Pedro ya estaba aprendiendo la lección aquí en I Pedro. Pienso que para cuando llegó al final de su vida—porque él escribió esto justo antes de morir—él realmente aprendió la lección del siervo, más que la lección del apóstol.
I Pedro 5:1: “A los ancianos que están entre ustedes los exhorto, incluso como un compañero anciano, y un testigo ocular de los sufrimientos de Cristo, y un participe de la gloria que está a punto de ser revelada: alimenten el rebaño de Dios que está entre ustedes, ejerciendo vigilancia no por compulsión, sino voluntariamente; no en afición de ganancias deshonestas, sino con una actitud anhelante” (versos 1-2). Esto demuestra que él aprendió muy bien lo que dice en Juan 21: ‘Si Me amas, alimenta a Mis ovejas.’
Verso 3: “No como ejerciendo señorío sobre sus posesiones, sino siendo ejemplos al rebaño de Dios” (versos 1-3). Yo pienso que cuando él escribió “un siervo y un apóstol” Pedro estaba mostrando un mayor entendimiento de su papel como apóstol y de lo que él debía hacer para ayudar, servir y enseñar a las personas.
II Pedro 1:1: “…a aquellos que han obtenido la misma preciosa fe que la nuestra…” Esto también muestra un gran crecimiento de parte de Pedro, porque cuando él estaba en Antioquia y se separó de los gentiles, da la impresión de que ellos tenían una salvación más grande y una fe más grande que la de los hermanos.
“…a aquellos que han obtenido la misma preciosa fe que la nuestra por la justicia de nuestro Dios y Salvador, Jesucristo” (verso 1). Esto se refiere a la justicia imputada que viene de Dios. Pedro aprendió la lección acerca de la gracia, porque en Gálatas 2 no la había aprendido y tampoco había aprendido la lección del arrepentimiento. Él seguía siendo como el apóstol a la circuncisión, siguiendo muchas de las tradiciones judías. Aquí, esto nos muestra que él aprendió la lección de la justicia por fe—que es a través de Jesucristo.
En el verso 2 hay cosas muy importantes e interesantes que necesitamos entender acerca de eso: “Gracia y paz sean multiplicadas a ustedes en el conocimiento de Dios y de Jesús nuestro Señor.” En este verso, la palabra conocimiento viene del griego ‘epignosis,’ aunque también hay otra palabra para conocimiento (la cual se usa más adelante) que significa sabiduría o entendimiento y esa otra palabra es ‘gnosis.’ Sin embargo, ‘epignosis’ significa el conocimiento que solamente puede ser impartido a usted espiritualmente, de parte de Dios. Esto es algo que usted no puede llegar a entender a menos que Dios se lo dé y se lo imparta. Es por eso que es multiplicado en el “…conocimiento—el epignosis—de Dios y de Jesucristo nuestro Señor.” Demostrando una vez más, que esto se conecta con el compañerismo de Dios el Padre y Jesucristo.
Veamos algunas cosas importantes en el verso 3: “De acuerdo a como Su divino poder nos ha dado… [Conferido, concedido o dado a nosotros]…todas las cosas que pertenecen a la vida y a la santidad, a través del conocimiento de Quien… [De nuevo la palabra ‘epignosis’—refiriéndose a que viene de Dios]…Quien nos llamó por Su propia gloria y virtud.” Ahora volvamos y analicemos esto un poco más.
Poder Divino—esto viene de la palabra griega ‘theios’;
· ‘Theios’ significa Divino
· ‘Theos’ significa Dios
Algunas personas han dicho que ‘Theos’ significa ‘Theios,’ pero no es así.
· ‘Theos’ significa Dios—es un sustantivo
· ‘Theios’ es un adjetivo que describe una cualidad de Dios
Otro punto importante acerca de esto es, que la religión mística del judaísmo tenía mucho que ver con el Poder Divino—o con el volverse Divino.
Actualmente estoy leyendo un libro titulado Luz por Luz de John Goodenough—creo que lo he mencionado; es un libro de 400 páginas. Es bastante detallado y voy pasándolo página por página. Pero no me había dado cuenta, hermanos, que los judíos y el judaísmo—especialmente los de Alejandría—habían paganizado tanto lo que Dios estaba haciendo, que ya no tenía ninguna relevancia a la Verdad de Dios. Por ejemplo, el sumo sacerdote con el Urim y Tummim que portaba en su pecho con las 12 piedras—cada piedra para cada una de las tribus de Israel—era uno de los signos del Zodiaco en el judaísmo. Cuando el sacerdote actuaba de parte de Dios, él era un hombre divino—mitad Dios/mitad hombre. Él era considerado el vice-regente de Dios para todos los hombres en la tierra.
Ahora, ¿No les suena eso un poco como a infalibilidad? Estoy empezando a entender por qué Dios destruyó todo ese sistema. Cada vez puedo ver más en los escritos de los apóstoles cómo ellos estaban luchando contra ese sistema; el judaísmo místico-contemplado, pretendía tener la escalera por la cual podían alcanzar el Divino. Así que aquí, Pedro está diciendo: “De acuerdo a como Su divino poder nos ha dado todas las cosas… [Viene de Dios]…todas las cosas que pertenecen a la vida…” (Verso 3). Hay otros dos lugares donde se usa ‘Divino.’
Romanos 1:18: “Ciertamente, la ira de Dios es revelada desde el cielo sobre toda impiedad e injusticia de los hombres que suprimen la verdad en injusticia… [Ellos están reteniendo la Verdad, sabiendo hacer lo correcto]…Porque eso que puede ser conocido de Dios es manifiesto entre ellos, porque Dios se los ha manifestado… [No en ellos, sino a ellos]…Porque las cosas invisibles de Él son percibidas desde la creación del mundo, siendo entendidas por las cosas que fueron hechas—Su eterno poder y Divinidad…” (Versos 18-20).
Divinidad—para demostrar que Dios lo dejó absolutamente claro por medio de la creación, que cualquiera que lo piense a profundidad, entendería que tuvo que haber sido creado por algo más grandioso que un ser humano y que no sucedió por sí mismo. Por lo tanto, tenía que venir de Alguien que es Divino. Está hablando de una cualidad que tiene Dios. “…Su eterno poder y Divinidad…” Todo esto está relacionado con la sustitución de la filosofía y todos hemos pasado por eso recientemente.
Vayamos a Colosenses capitulo dos, y veamos como esto está conectado con la filosofía—porque la filosofía y la religión de la filosofía era una manera de volverse perfecto—por medio de sus propias obras religiosas. Eso era para llegar a la iluminación por medio de la contemplación mística. En la actualidad, la meditación de yoga es el primer paso de eso, así que es lo mismo.
Colosenses 2:8: “Estén en guardia para que nadie los tome cautivos a través de filosofía y vano engaño, de acuerdo a las tradiciones de hombres, de acuerdo a los elementos del mundo, y no de acuerdo a Cristo… [Esos son: fabulas vanas y engaño, mentiras en el nombre de Dios]…Porque en Él vive corporalmente toda la plenitud de la Divinidad” (versos 8-9). Pedro nos está diciendo varias cosas importantes aquí, primero:
· Dios tiene un cuerpo. Toda la Divinidad mora en Cristo, en relación a los seres humanos. Usted no va a encontrar Divinidad a través de la filosofía—sino a través de Cristo y usted está completo en Él.
· La filosofía y las cosas que se enseñan son vano engaño.
Por eso es confuso cuando lee algunas de estas cosas. ¡Así fueron planificadas! Para que usted piense que alguien más inteligente lo escribió—pero es al revés.
“…de acuerdo a los elementos del mundo, y no de acuerdo a Cristo. Porque en Él [Cristo] vive corporalmente toda la plenitud…” (Verso 8).
También tienen otra doctrina de religión mística y aspiraciones filosóficas y es: el llegar a la plenitud. Por eso él está usando estas palabras en este contexto. Aquí, Pedro está diciendo que Dios nos ha dado todas las cosas, lo cual significa que no necesitamos ir fuera de lo que Cristo nos ha dado, para tratar de descubrir todas las cosas relacionadas a la vida y el conocimiento de Cristo. Tenemos que quedarnos dentro de Él.
Esos son los otros dos lugares donde se usa ‘Theios’. Es II Pedro 1:3: “De acuerdo a como Su divino poder nos ha dado todas las cosas que pertenecen a la vida y a la santidad…” Aquí habla acerca del poder de Dios y de lo que Él tiene.
Hebreos 1:1 es otra Escritura que se conecta directamente con esto. ¿Dónde se va a sentar Cristo? ¡Él se va a sentar a la mano derecha de Dios! “Dios, Quien habló a los padres en tiempos diferentes en el pasado y en muchas formas por los profetas, nos ha hablado en estos últimos días por Su Hijo, a Quien Él ha señalado heredero de todas las cosas, por Quien también Él hizo los mundos; Quien, siendo el brillo de Su gloria y la imagen exacta de Su persona…” (Versos 1-3). Esto también nos demuestra que Dios tiene imagen.
En la filosofía, Dios no tiene imagen. Dios es lo que ellos llaman incorpóreo; significando que Él no tiene partes. Nosotros somos corpóreos, porque sí tenemos partes. ¿Qué dijo Jesús cuando Felipe dijo, ‘Muéstranos al Padre’? Dijo, ‘Ve y mira el bulto.’ ¡NO! Él dijo, si Me han visto, han visto al Padre.’ Cristo es la imagen expresada de Su persona, y la Biblia Ginebra dice: la ‘representación grabada de Dios, hecho exactamente como Él es.
“…y sosteniendo todas las cosas por la palabra de Su propio poder…” (Verso 3). Ese es el poder Divino que Dios está usando para darnos. Cristo tiene el poder de sostener todas las cosas ¡por la Palabra de Su poder! ¡Su Palabra! ¿Qué tan poderosa es la Palabra de Dios? Por Su Palabra, Él puede cerrar todo el universo. ¿Recuerdan cuando repasamos la creación y Dios dijo, ‘Que haya luz, y se hizo la luz’? Ahora, si Dios dijera, ‘Que todo el mundo llegue a su fin’ ¡Se terminaría!
“…sosteniendo todas las cosas por la palabra de Su propio poder, cuando Él hubo por Sí mismo limpiado nuestros pecados, se sentó a la mano derecha de la Majestad en la altura” (verso 3). Ese es el tipo de poder Divino que Dios nos ha dado, con el que estamos trabajando y por medio del cual podemos clamar a Dios.
II Pedro 1:3: “que pertenecen a la vida y a la santidad, a través del conocimiento de Quien nos llamó por Su propia gloria y virtud.” Dios es Quien tiene que llamar, como una intervención Divina en su vida por el Poder más grande que hay en el universo. Porque Dios el Padre Mismo lo ama a usted por Su propia decisión. Nos ha llamado por Su Poder, Su Sabiduría y Su Bondad.
Verso 4: “A través de la cual… [Por medio del llamamiento, del conocimiento y del poder Divino]…Él nos ha dado las promesas más grandes y preciosas… [Las más grandiosas que puede haber. En el griego, estas palabras abundan tanto, que es el nivel de expresión más alto que puede haber]…dado las más grandes y preciosas promesas, que a través de estas ustedes pueden convertirse en participes de la naturaleza divina…” Ahí está de nuevo el poder Divino, la naturaleza Divina. “…ustedes pueden convertirse en participes de la naturaleza divina…” Y claro que eso será en la resurrección, ¡así es! Ahora tenemos las arras del Espíritu Santo (Efesios 1:13; II Corintios 1:22); las arras, el engendramiento, el pago inicial hasta obtener ‘la redención de la posesión comprada.’
Pedro está haciendo lo mismo que hizo el apóstol Juan, antes de que recibiera una corrección muy pesada en I Juan 3. Esto también es una buena lección para nosotros: cuando las cosas se dificulten, que va a ser así, cuando ‘los principios de dolores’ empiecen a tener lugar, y nada funcione, usted tiene que tener la esperanza y la fe que vienen de Dios. Eso siempre va a funcionar. ¡El amor de Dios nunca falla! ¡Nunca! Juan estaba haciendo lo mismo cuando él escribió cómo va a ser esta naturaleza Divina: ¡nosotros seremos como Dios! Esa no es una doctrina de Satanás el diablo. La doctrina de Satanás el diablo para convertirse en Dios se encuentra en la filosofía; cómo usted pasa a través de grados, hasta que llega a la iluminación final. A eso se refiere Satanás con ‘volverse dioses.’ Lo que Dios dice:
I Juan 3:1: “¡He aquí! ¡Que glorioso amor nos ha dado el Padre, que deberíamos ser llamados los hijos de Dios! Por esta misma razón, el mundo no nos conoce porque no lo conoció a Él. Amados, ahora somos los hijos de Dios, y no ha sido revelado aun lo que seremos; pero sabemos que cuando Él sea manifestado, seremos como Él, porque lo veremos exactamente como Él es” (versos 1-2). Esta es la promesa más grandiosa que puede haber. Que:
· Podamos tener vida eterna
· Podamos tener una naturaleza Divina
· Podemos vivir con Dios el Padre y Jesucristo y todos los santos en la Jerusalén celestial
Y ese es todo el escenario y significado de la Fiesta de Tabernáculos, ¿no es así? ¡Sí!
Pedro empieza aquí, porque algunas de las cosas que va a mencionar más adelante son muy pesadas ¡efectivamente! Así como lo hizo Juan aquí en el verso 3: “Y todo el que tiene esta esperanza en Él… [La fe, la esperanza, y el amor superan todas las dificultades y ¡siempre lo harán!]…se purifica a sí mismo, incluso como Él es puro.” No se puede ser más puro que Jesucristo, pero la justicia de Dios imputada lo hace posible. Esto es algo tremendo que Él nos ha dado.
Vayamos a Efesios capitulo tres, porque ahí está lo que Dios puede hacer. Cuando pensamos en Dios y en algunas de las cosas que no salen bien—porque a mí me ha pasado eso y a usted le ha pasado—recordamos las promesas que se nos dan…
Efesios 3:19: “Y de conocer el amor de Cristo, el cual sobrepasa el conocimiento humano; para que puedan ser llenados con toda la plenitud de Dios.” Esa es una promesa tremenda y maravillosa, ¿no es así? ¡Ser llenados con toda la plenitud de Dios! ¿Alguna vez se ha sentado simplemente a contemplar lo que eso significa? ¿Ser llenados con la plenitud de Dios? ¡Es realmente impresionante!
Verso 20: “Ahora a Él, Quien es capaz de hacer abundantemente excesivo… [La misma palabra que está en el griego, como promesas grandes y preciosas]…por encima de todo lo que pedimos o pensamos, según el poder que está obrando en nosotros.” ¡Dios es capaz de hacer eso y es algo tremendo! Hermanos, ¡Dios nos ha dado estas promesas fantásticas! ¡Y eso es algo maravilloso! Yo no sé cómo será cuando seamos seres espirituales, pero les diré que entre más anciano me vuelvo, sé que la vida humana no tendrá eso. Será tan grandioso volvernos partícipes de la naturaleza Divina.
II Pedro 1:4: “…que a través de estas ustedes pueden convertirse en participes de la naturaleza divina, habiendo escapado de la corrupción que está en el mundo a través de lujuria.” Cuando recibimos el Espíritu Santo de Dios, somos liberados del dominio de la ‘ley del pecado y muerte’ en nosotros, que nos controla hacia la muerte. Aun la tenemos, pero ya no tiene su puño de hierro sobre nosotros; debemos vencerla.
Quiero que nos enfoquemos en la palabra convertirse. Vayamos al evangelio de Juan en el capítulo uno—la palabra convertirse significa: ser hecho o convertido, o creado en ‘e-entos.’
Juan 1:1: “En el principio era la Palabra, y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios… [Mostrando a dos individuos]…Él estaba en el principio con Dios. Todas las cosas vinieron a ser a través de Él, y ni siquiera una cosa que fue creada vino a ser sin Él. En Él estaba la vida…” (Versos 1-4).
Verso 14: “Y la Palabra se hizo carne…” Lo que Dios nos está mostrando es esto: está Dios Quien era Logos; Quien creó todo lo que hay. En Él había vida inherente y Él se convirtió en carne para mostrarnos que nosotros podemos convertirnos en Dios.
Cristo se hizo carne “…e hizo tabernáculo [moró] entre nosotros… [El griego ahí significa ‘tabernaculó’—así que esto tiene que ver con la Fiesta de Tabernáculos; Cristo viviendo en la tierra]… (Y nosotros mismos vimos Su gloria, la gloria como del único engendrado con el Padre), lleno de gracia y verdad” (verso 14).
Así que, cuando dice que nosotros nos volveremos participes de la naturaleza Divina, se está refiriendo a algo recíproco de lo que Él hizo. Tiene mucho significado cuando entendemos lo que Cristo hizo para convertirse en humano, cargar la ‘ley de pecado y muerte’ dentro de Él y aun así, nunca pecar y ser ese sacrificio perfecto para todos los seres humanos. Entonces, cuando Él dice, ‘nos convertiremos en participes de la naturaleza Divina’— ¡Eso también significa mucho! Es tremendamente inspirador y esas son las promesas grandiosas y preciosas. Hermanos, nunca dejen que nadie les quite eso. Puede que el mundo se caiga a su alrededor, pero si usted tiene esa esperanza y entiende esa fe y ama a Dios, ¡nadie se lo puede quitar! Eso lo va a ayudar a salir adelante de lo que sea.
II Pedro 1:5: “Y por esta misma razón también, habiendo además aplicado toda diligencia…” Pedro está haciendo lo que Dios quiere que él haga; esto es: inspirarlo para que él inspire a los hermanos. Usted trabaja y logra cuando está inspirado. Cuando usted es contratado, usted reporta su hora de entrada, hace lo que tiene que hacer para cumplir con la producción, reporta su hora de salida y se va a casa. Pero Dios nos ha llamado a la causa más grande que puede haber y Pedro nos está inspirando a ser diligentes en lo que estamos haciendo, porque amamos a Dios y queremos hacer esas cosas.
“…habiendo además aplicado toda diligencia, añadan a su fe, virtud; y a la virtud, conocimiento… [‘gnosis’—que es discernimiento, sabiduría y entendimiento]…Y al conocimiento, auto-control; y al auto-control, resistencia; y a la resistencia, santidad; y a la santidad, amor fraternal; y al amor fraternal, el amor de Dios” (versos 5-7). En la Reina Valera dice ‘caridad,’ pero esa es una traducción muy deficiente. Realmente significa el amor, ‘el ágape’; que es el amor que viene de Dios.
Me parece muy interesante como es que muchas veces, ‘los últimos serán los primeros y los primeros serán los últimos.’ Veremos que es el mismo caso cuando comparamos esto con Gálatas 5, donde Pablo lo hace un poco diferente. Pedro termina con el amor y Pablo empieza con el amor.
Gálatas 5:22: “Pero el fruto del Espíritu es amor… [Pedro está hablando de lo mismo, en lo que también tiene que trabajar, que es una obra de fe, aunque no es una obra que usted puede hacer, sino Cristo en usted]…gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fe, mansedumbre, autocontrol; contra tales cosas no hay ley” (versos 22-23). Analicemos esto de la fe un poco más. La fe se clasifica en tres categorías distintas dentro del Nuevo Testamento:
· El cuerpo de creencias—la fe
· Su creencia personal—de la cual entonces tenemos sanaciones y demás
· La fe misma de Cristo
Y de hecho necesita las tres para la salvación, así que estudiémoslas.
1) Cuerpo de creencias
Romanos 1:5: “Por Quien… [Habla acerca de Cristo, el Espíritu de Santidad por la resurrección de los muertos]…hemos recibido gracia y apostolado para obediencia a la fe…” Eso significa un conjunto de creencias basadas en la fe, la cual está basada en las Escrituras. Y por cierto, la Fiesta de Tabernáculos no es la fiesta de fe, es la Fiesta de los Tabernáculos. Pero sí la guardamos por fe.
“…entre todas las naciones…” (Verso 5). Eso es muy interesante, ¿no es así? Uno mira esa declaración y es casi contradictoria para aquellos que luchan contra las obras y las leyes, ¿Cierto? Entre la gracia y la ley; la fe y la ley; obras y dones. ‘La obediencia a la fe’ muestra que si hay fe, entonces tiene que ser obediente a ella. Este es el conjunto de fe que viene como un conjunto de creencias.
Efesios 4:4—esto es interesante. ¿Cuántas fes hay, en cuanto a conjuntos de creencias? Bueno, Pablo lo deja muy claro: “Hay un cuerpo… [Que significa que solamente hay un verdadero cuerpo espiritual de Cristo]…y un Espíritu… [Que viene del Padre]…incluso como ustedes fueron también llamados en una esperanza de su llamado… [Algunos no están esperando la resurrección; algunos no irán al cielo, etc. Pero hay una esperanza]…Un Señor, una fe… [Y es interesante que hay]…un bautismo” (versos 4-5). No muchos, ¡Uno!
Algunos no son enterrados en agua, y otros solamente son rociados—usted es enterrado en la inmersión del agua para la muerte del viejo hombre y para ser levantado en ‘novedad de vida.’ Este único cuerpo es donde Cristo ve que está la Iglesia. No está restringida a ningún hombre, ni a una organización corporativa. Así es como Dios lo está viendo y es por un espíritu que usted es bautizado hacia un cuerpo. Por eso que Pablo lo está escribiendo aquí.
Vayamos a Colosenses 2:6 y veamos algo más. “Por tanto, como han recibido a Cristo Jesús el Señor, estén caminando en Él; siendo arraigados y construidos en Él, y siendo confirmados en la fe… [Ese es el conjunto de doctrinas de creencia]…exactamente como fueron enseñados, abundando en ella con acción de gracias” (versos 6-7).
Vayamos a II Corintios 13 y veamos algo acerca de esto, que también empieza a guiarnos hacia lo siguiente: ya sea que tenga fe y ya sea que Cristo esté en usted. Esto se puede aplicar de ambas maneras: su creencia personal, al conjunto de creencias, y a la fe de Cristo en usted. De hecho, las tres se podrían aplicar aquí.
II Corintios 13:5: “Examínense a sí mismos para ver si están en la fe; pruébense a sí mismos. ¿No saben de sí mismos que Jesucristo está en ustedes? De otra forma, están reprobados.” Las tres están como conectadas en este verso. Jesús hizo una profunda declaración y pueden ponerla en el margen de sus notas—Lucas 8:8, Él dijo ‘Cuando el Hijo de hombre venga, ¿encontrará fe en la tierra?’—y ésta es la fe. Esas son las doctrinas, las doctrinas de creencia correctas.
2) Fe como una creencia personal—como algo que lo hace actuar, porque usted lo cree. El tipo de fe que lo motiva a hacer esas cosas. Recuerde que usted tiene que ser obediente a la fe, que es la doctrina de creencias. Pero entonces, si usted tiene la fe, entonces tendrá las obras de la fe, como las tenía Abraham—porque él le creía a Dios, por lo tanto, él tenía obras de fe.
Romanos 1:8: “Primero, le agradezco verdaderamente a mi Dios a través de Jesucristo por todos ustedes, pues se habla de su fe en todo el mundo.” Esto significa que ellos son un tipo de fe viviente y creyente en Jesucristo, de la que se habla bien y es bien conocida.
Verso 17: “Porque en él la justicia de Dios… [‘En él’ es el Evangelio]…es revelada de fe hacia fe…” La fe de Cristo a usted y su fe de regreso a Cristo—y el griego significa hacia—así que es un intercambio espiritual.
(Ir a la siguiente pista)
Este tipo de fe es con la que obtenemos la fe de Cristo en nosotros, porque:
· Nosotros creemos
· Seguimos el conjunto de creencias
· Crecemos en gracia y conocimiento, en el Espíritu de Dios y empezamos a tener más fe a causa de eso
· Entonces la fe misma de Cristo se vuelve parte de nosotros
Aquí Pablo muestra que es de fe hacia fe: “…de acuerdo a como está escrito: ‘El justo vivirá por fe.’” Esa es la confianza, la creencia, la esperanza y el amor en Dios. Ellos vivirán por fe.
Romanos 4:1 está hablando acerca de Abraham y ¡Abraham le creyó a Dios! Le fue ‘imputado por justicia’ porque él creyó y actuó por esa creencia. “¿Qué entonces diremos que nuestro padre Abraham fue hallado con respecto a la carne? Porque si Abraham fue justificado por obras, él tiene una base para jactarse, pero no ante Dios. Porque ¿qué dice la Escritura? “Y Abraham le creyó a Dios, y le fue imputado por justicia.’” (Versos 1-3). Entonces, usted es motivado por esta creencia… y actúa por esta creencia. Ahora veamos:
· Cómo es esta creencia
· Cómo vamos a hacerlo
· Cómo lo hizo Pablo
· Cómo debería ser nuestra fe
· En quien deberíamos confiar
· Cómo deberíamos aplicarlo
I Corintios 2:1: “Y yo, hermanos, cuando vine a ustedes, no vine con superioridad de habla o sabiduría, en proclamarles el testimonio de Dios a ustedes. Porque decidí no saber nada entre ustedes excepto a Jesucristo, y a Él crucificado. Y yo estaba en debilidad y en temor y en mucho temblor cuando estaba con ustedes; y mi mensaje y mi predicación no fue en palabras persuasivas de sabiduría humana; más bien, fue en demostración del Espíritu y de poder; para que su fe pudiera no ser en la sabiduría de hombres, sino en el poder de Dios” (versos 1-5). Eso es lo que el poder Divino de Dios debe hacer para darnos ese tipo de fe.
Llevemos esto un poco más lejos y veamos algo más aquí. ¿Cómo crece usted en fe? Los apóstoles querían crecer en fe; ellos estaban en la misma situación. ‘Vaya, necesito ese tipo de fe, necesito más fe.’ En un momento veremos el tipo de fe con la cual estaremos tratando y lo que dijo Jesús acerca de eso.
Lucas 17:5: “Luego los apóstoles le dijeron al Señor, ‘Incrementa nuestra fe.’ Pero el Señor dijo, ‘Si tuvieran fe como una diminuta semilla de mostaza, podrían decir a este árbol de sicomoro, ‘Desarráigate, y se plantado en el mar,’ y les obedecería’” (versos 5-6). Durante toda mi vida, yo no he sabido de alguien que haya hecho eso. Esto nos dice qué tipo de fe tenemos todos, o cuánta tenemos, si quisiéramos medirla. Después él explica algo más que es importante que entendamos.
Verso 7: “¿Pero cuál de ustedes teniendo un siervo arando o pastoreando le dirá inmediatamente cuando venga del campo, ‘Ven y siéntate y come’? Más bien, ¿no le dirá, ‘Prepara para que pueda comer, y cíñete, y sírveme mientras como y bebo; y después puedes comer y beber’?... [¡No hay ninguna unión ahí! Estas son malas noticias para cualquier unión]… ¿Está agradecido con ese siervo porque hizo las cosas que le fueron ordenadas? No creo. Así mismo ustedes también, cuando hayan hecho todas las cosas que les son mandadas, digan, ‘Somos siervos inútiles, porque hemos hecho lo que estábamos obligados a hacer’” (versos 7-10).
Esa es una fuerte declaración ¿no es así? Cuando usted considera todo lo que hace, considera todo lo que Dios ha ordenado; y cuando usted haya terminado, si no tiene fe, esperanza y amor, entonces ‘usted es un siervo inútil.’
Veamos algo más acerca de eso; Mateo 17 muestra una manera de salir del dilema. Esto tiene que ver con la sanación, y cubriremos algunas cosas acerca de la sanación en unos momentos. Ellos bajaron de la montaña—esto es después del Monte de la transfiguración—vieron a Jesús transfigurarse en frente de ellos, bajaron y los discípulos no fueron capaces de sacar a un demonio de un niño pequeño.
Mateo 17:14: “Y cuando habían venido a la multitud, un hombre vino a Él, arrodillándose a Él, y diciendo, ‘Señor, ten misericordia de mi hijo, porque él es demente y sufre miserablemente; porque a menudo cae en el fuego, y a menudo en el agua. Y lo traje a Tus discípulos, pero ellos no fueron capaces de sanarlo.’” (Versos 14-16). ¡Vaya conjunto de circunstancias! Esto pone a todos bajo una mala luz. ¿Qué dijo Jesús?
Verso 17: “Entonces Jesús respondió y dijo, “Oh generación sin fe y perversa... [¿A quiénes les estaba hablando? ¡A Sus discípulos! A ellos les estaba hablando. Ellos no habían salido del mundo lo suficiente para entender realmente]… ¿cuánto tiempo estaré con ustedes? ¿Cuánto tiempo soportaré con ustedes en su incredulidad? Tráiganlo aquí a Mí. Y Jesús reprendió al demonio, y éste salió de él, y el muchacho fue sano desde aquella hora. Entonces los discípulos vinieron a Jesús en privado y dijeron, ‘¿Por qué nosotros no fuimos capaces de echarlo fuera?’” (Versos 17-19).
Esa es una pregunta muy importante, ¿cierto? Hay algunas cosas difíciles que se nos presentan: sanaciones difíciles, problemas mentales difíciles, problemas físicos difíciles. Nosotros tenemos que admitir que tal vez algunos de nosotros estamos en la misma categoría que los discípulos—tal vez somos algo incrédulos. No somos tan fieles como pensamos que somos realmente.
Verso 20: “Y Jesús les dijo, ‘Por causa de su incredulidad…’” Ellos probablemente llegaron y dijeron, ‘me pregunto si podemos hacer esto’ el problema es que ya estaban vencidos; porque no lo pudieron hacer. ¡Dios lo va a hacer! Es por eso que cuando usted es ungido, tiene que reclamar las promesas de Cristo. Ningún ministro tiene algo inherente dentro de sí, que pueda sanar a alguien. Dios nos ha dado cosas muy simples de hacer: la unción, imposición de manos, oración y pañuelos de unción y hemos tenido sanaciones tremendas. Sabemos que tendremos más en el futuro. Hemos tenido algunas personas que no han sido sanadas, porque no todas las veces uno va a ser sanado.
A veces Dios permite—igual que con el apóstol Pablo—una ‘espina en la carne’; o en la cadera, en la espalda o el cuello. ¡A veces Dios hace eso! Pero no hace diferencia, porque el apóstol Pablo dijo que Cristo le dijo que ‘Su gracia era suficiente.’ Así que, si usted tiene gracia hacia salvación y está batallando con un pequeño problema, ¡no se preocupe! Dios se va a encargar de eso, pero si no lo hace, recuerde que la carne se va a pudrir de cualquier manera. ¿Va usted a vivir para siempre en la carne? ¡No, no va a ser así!
Verso 20: “Y Jesús les dijo, ‘Por causa de su incredulidad. Porque verdaderamente les digo, si tienen fe como una diminuta semilla de mostaza, dirán a esta montaña, ‘Remuévete de aquí,’ y ésta se removerá; y nada será imposible para ustedes. Pero ésta clase no sale excepto por oración y ayuno” (versos 20-21). Eso muestra que cuando usted ora, ayuna y va ante Dios, no es por sí mismo; no es para que usted se haga grandioso—sino que es para que usted le pida a Dios que le conceda Su fe, Su confianza y Su habilidad, porque lo que sea que usted haga, lo hace en el nombre de Cristo.
Vayamos a Hechos capitulo tres, y veamos algo que sucedió después. ¿Habrán entendido Pedro y Santiago este punto? ¡Supongo que sí! Hay un tiempo en el que Dios derrama milagros. Hay otras veces en las que no lo hace. ¿Recuerdan el registro del apóstol Pablo, en el que uno de sus ayudantes estaba enfermo de muerte? Ellos oraron, oraron y oraron y entonces él dice ‘Dios lo libró de la muerte y tuvo misericordia de mí.’ Pero aquí en Hechos capitulo tres, tenemos un milagro tremendo. Aquí está el hombre que estaba enfermo desde el vientre de su madre, y estaba cojo.
Hechos 3:2: “Y un cierto hombre quien era cojo desde el vientre de su madre estaba siendo cargado, a quien ubicaban diariamente en la puerta del templo la cual es llamada Hermosa… [Lo ponían ahí en la puerta para que pudiera ser sanado]…para mendigar limosnas de aquellos que estaban yendo al templo. Cuando él vio a Pedro y Juan a punto de entrar al templo, él pidió recibir limosnas. Pero Pedro y Juan, lo observaron intensamente, dijeron, ‘Míranos.’ Y él fijó su atención en ellos, esperando recibir algo de ellos. Pero Pedro dijo, ‘Plata y oro no tengo; pero lo que tengo, esto te doy. En el nombre de Jesucristo el Nazareno, levántate y camina.’ Entonces tomándolo de la mano derecha, lo levantó; e inmediatamente sus pies y huesos del tobillo fueron fortalecidos. Y brincando, se puso de pie y caminó…” (Versos 7-8).
Nunca había caminado antes porque él estaba en esa condición desde el día que nació. Dios ha creado a algunas personas para el propósito de un milagro como este. Como el caso del hombre que nació ciego para el propósito de que Jesús lo sanara.
“…y entró en el templo con ellos caminando y brincando y alabando a Dios. Ahora, todo el pueblo lo vio caminando y alabando a Dios.” (Versos 8-9). Todos sabían quién era él, entonces se preguntaron cómo pasó esto.
Verso 12: “Y cuando Pedro vio esto, respondió a la gente, “Hombres, Israelitas, ¿Por qué están maravillados de esto? Y ¿Por qué están mirándonos tan intensamente como si por nuestro propio poder o piedad lo hubiéramos hecho caminar? El Dios de Abraham e Isaac y Jacob, el Dios de nuestros padres, ha glorificado a Su Hijo Jesús, Quien ustedes entregaron, y negaron en la presencia de Pilato, después de haberlo juzgado para liberarlo. Pero ustedes negaron al Santo y Justo, y solicitaron que un hombre que era un asesino les fuera otorgado; y mataron al Autor de vida a Quien Dios ha levantado de los muertos, de lo cual nosotros somos testigos. Y a través de fe en Su nombre, este hombre a quien ustedes ven y conocen fue fortalecido en Su nombre; y la fe que es a través de Él’…” (Versos 12-16).
Lo que lo sanó fue el mismo nombre y poder de Dios a través de la fe en eso, la creencia en eso. Ninguna fe en la parte del hombre, ¿cierto? Él no tenía fe. Él no dijo, ‘Oh, sáname en el nombre de Jesús.’ Pedro y Juan sólo se quedaron ahí parados mirándolo y Pedro dijo, ‘Levántate y camina en el nombre de Jesucristo.’ Así que, cuando las cosas se hacen en el nombre de Jesucristo, tenemos que pedirle a Dios que nos ayude a incrementar nuestra fe. ¿Cómo se hace eso?
Veamos algo muy interesante en Marcos 11, porque aquí vuelve a conectar las cosas con la fe de Cristo en nosotros. Entonces nuestra fe y la fe de Cristo en nosotros se traslapan. Y entre más hemos estado en la iglesia, más debería ser la fe de Cristo en nosotros ya siendo nuestra propia fe, porque debemos crecer en eso. Aquí está donde Cristo maldijo a la higuera, y al volver ellos a la mañana siguiente, vieron que se había marchitado desde las raíces.
Marcos 11:20: “Y en la mañana, mientras ellos pasaban, vieron la higuera seca desde las raíces. Entonces Pedro recordó y Le dijo, ‘¡Mira, Maestro! La higuera que maldijiste se ha secado.’ Y Jesús respondió y les dijo, ‘Tengan fe de Dios… [Si eso se lee en el griego, significa tener la fe misma de Dios. ¿Tenía Cristo la fe misma de Dios en sí Mismo? ¡Sí!]…Porque verdaderamente les digo, quienquiera que diga a esta montaña, ‘Quítese y échese en el mar.’ y no dude en su corazón, sino crea que lo que dijo tendrá lugar, tendrá cualquier cosa que diga” (versos 20-23).
La mayoría de nosotros cuando hacemos esto—me incluyo a mí mismo—nos arrodillamos y le pedimos algo a Dios, lo primero que decimos es: ‘me pregunto si Dios va a hacer eso’ ¡Usted ya lo ha perdido! Tenemos que tener fe de que Dios va a hacer lo que es mejor de acuerdo a Su voluntad. Recuerde que Dios está más interesado en otras cosas.
Es por eso que Él dice, verso 25: “Pero cuando estén de pie orando, si tienen cualquier cosa contra cualquiera, perdonen… [¿Qué hacemos cuando vamos a orar? ¿Cuál es una de las primeras cosas que hacemos? Cuando oramos, le pedimos a Dios que perdone nuestros pecados, ¿cierto? Deseamos eso, ¿Cierto? Yo sé que yo sí; estoy seguro que ustedes también. También hay otro tipo de perdón que viene con eso.]…cuando estén de pie orando, si tienen cualquier cosa contra cualquiera, perdonen, para que su Padre Quien está en el cielo pueda perdonar sus ofensas.”
¿Por qué requiere Dios eso? Para que usted pueda tener una actitud piadosa. ¡Es por eso! ¿Puede usted pedirle a Dios que lo bendiga y que maldiga a su enemigo? ¡Puede hacerlo! Pero ¿Por qué no simplemente dejar que el enemigo caiga por sus propios medios? ¿Puede Dios lidiar con el enemigo? Como leemos en Zacarías 15, ¿Es Dios capaz de lidiar con ellos? Si ellos vienen y le hacen algo a usted, ¿Puede usted cambiar eso? ¡No, no puede!
Vayamos a Mateo 5:23 y veamos algo muy importante. “Por esta razón, si traen su regalo al altar… [Es lo que usted está haciendo—cuando viene a Dios para orar y ofrecer los sacrificios espirituales de la oración, el ayuno, la alabanza y la gratitud—pidiendo perdón]…y allí recuerdan que su hermano tiene algo en contra suya… [Este es su hermano, es alguien cercano a usted]…Dejen su regalo allí delante del altar, y vayan por su camino; primero sean reconciliados con su hermano, y luego vengan y ofrezcan su regalo” (versos 23-24). ¿Por qué? Porque eso lo hace tener la actitud y la mente correcta, y lo pone en las circunstancias correctas ¡para que Dios lo pueda bendecir!
Verso 43— ¡Esto es lo más difícil! Usted no puede simplemente leer esto y decir, ‘Ah vaya, qué maravillosas son estas palabras’—que sí lo son—y salir y esperar poder hacerlas instantáneamente. Es difícil, “Ustedes han escuchado que fue dicho, ‘Amarán a su prójimo y odiarán a su enemigo’… [¡Eso es difícil! Especialmente cuando su enemigo es despreciable, ¿Cierto? ¡Sí!]…Pero Yo les digo, amen a sus enemigos, bendigan a aquellos que los maldicen, hagan bien a aquellos que los odian, y oren por aquellos que maliciosamente los usan y persiguen. Para que ustedes mismos puedan ser hijos de su Padre que está en el cielo; porque Él hace que Su sol se levante sobre el malo y sobre el bueno, y envía lluvia sobre el justo y sobre el injusto. Porque si aman a aquellos que los aman, ¿Que recompensa tienen? ¿No practican los colectores de impuestos la misma cosa?’” (Versos 43-46).
Este es un gran requisito y es un requisito de por vida, hermanos. Muchas veces, me encuentro a mí mismo haciendo lo opuesto de lo que dice aquí. Pero sí sé esto: Cuando perdono a mi enemigo y saco los malos pensamientos de mi cabeza, entonces tengo paz mental—les puedo decir eso. Solamente los dejo en manos de Dios, pero ¿Qué tal si la persona no puede ir con ellos y tratar de resolver el asunto de esa manera? ¿Qué tal si les han azotado la puerta y no los escuchan? No importa, usted aun así los perdona en su corazón y en su mente, los pone en manos de Dios y deja que Dios se encargue de ello. ¿Puede Dios encargarse de ello? ¡Sí! Por ejemplo, muchas personas han dicho que Dios va a resolver los problemas en una de las grandes iglesias de Dios. ¡Sí, Él lo va a resolver! ¿Qué está sucediendo? ¡Solamente observen! Es por eso que en algunos casos, cuando no hay cambio, hay que irse. ¡Hay que dejar que Dios lo resuelva! Solamente espero que haya verdadero arrepentimiento. Si no, me temo que van a haber malas noticias. La verdad yo no pienso que vaya a haber arrepentimiento, porque ha habido muchas advertencias.
Todos esos aspectos son parte de la solución. Entonces, ahora que llegamos al tema de la oración, noten Mateo 6:9: “Por tanto, deben orar siguiendo esta manera… [Esta es la oración trazada o el modelo de oración]…‘Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea Tu nombre; Tu reino venga; Tu voluntad sea hecha sobre la tierra como lo es en el cielo; danos este día nuestro pan diario; y perdónanos nuestras deudas, como nosotros también perdonamos a nuestros deudores” (versos 9-12). Ahí está todo y eso es parte de la fe y de la sanación.
Ahora veamos algunas otras cosas que hizo Jesús concernientes a la sanación, y la fe que se logró. Vayamos a Marcos capitulo dos, porque veremos que la sanación requiere de la fe de ambas personas:
· La fe del que está pidiendo la sanación
· La del que es llamado, en el caso de un anciano, para hacer la unción
En este caso era ¡Cristo! ¿Tenía Cristo una fe perfecta? ¡Absolutamente! Él no tenía ningún problema con la fe.
Marcos 2:1: “Y después de algunos días, Él volvió a entrar a Capernaúm, y fue reportado que Él estaba en la casa. E inmediatamente se reunieron muchos, tanto que ya no había lugar, ni siquiera en la puerta; y Él les predicó la Palabra. Entonces ellos vinieron a Él, trayéndole a un parapléjico cargado por cuatro hombres.” (Versos 1-3). En otras palabras, había cuatro hombres cargando la camilla y llevaban a un hombre sobre ella, pero no podían entrar. Bueno, usaron algo de iniciativa, ¿no es así? ¿Qué hicieron? ¡Se subieron por el techo!
Verso 4: “Y ya que ellos no fueron capaces de acercarse a Él por causa de la multitud, descubrieron el techo donde Él estaba; y después de romperlo abierto, bajaron la camilla sobre la cual estaba acostado el parapléjico… [Él baja en medio de todos; interrumpiendo una reunión]…Ahora, cuando Jesús vio su fe… [Tomó algo de trabajo, tomó algo de acción]… le dijo al parapléjico, ‘Hijo, tus pecados te han sido perdonados’” (versos 4-5). Aquí es donde sabemos que la enfermedad es un resultado del pecado, aunque no dice lo que era. A veces es un pecado que alguien más ha cometido contra su cuerpo. A veces alguien estornuda sobre usted y le pega un virus terrible. Sigue siendo pecado, ¡pecado físico!
Verso 6: “Pero algunos de los escribas estaban ahí sentados y razonando en sus corazones, ‘¿Por qué habla este hombre tales blasfemias? ¿Quién tiene el poder para perdonar pecados, excepto uno, y ese es Dios?’ Y Jesús inmediatamente supo en Su espíritu lo que ellos estaban razonando dentro de sí mismos, y les dijo, “¿Por qué están ustedes razonando estas cosas en sus corazones? ¿Cuál es más fácil? ¿Decirle al parapléjico, ‘Tus pecados te han sido perdonados’? ¿O decir, ‘Levántate, y toma tu camilla y camina’? Pero para que ustedes puedan entender que el Hijo de hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados,” Él le dijo al parapléjico, “Yo te digo, levántate y recoge tu camilla, y vete a tu casa.” E inmediatamente él se levantó y, después de recoger su camilla, salió en la presencia de todos ellos; así que todos estuvieron asombrados y glorificaron a Dios, diciendo, “¡Nunca hemos visto algo semejante!” (Versos 6-12).
¡Qué tremendo! Cuando vemos algo como esto: alguien enfermo con una parálisis o algo así, inmediatamente tratamos de averiguar cómo sucedió y de quien fue la culpa. Después hacemos un juicio en nuestra mente y nos damos cuenta de que estábamos equivocados la primera vez. Si podemos ayudarlos y ellos nos pueden explicar algunas cosas, entonces tal vez podamos hacerlo. Pero no va a hacer ningún bien andar acusándolos de distintas cosas, cuando tal vez ni siquiera fue su culpa. El punto es: que Cristo tenía fe, ellos tenían fe, y Dios los sanó.
Vayamos a Santiago capitulo cinco, porque les voy a leer otros ejemplos de sanaciones. Hay un ejemplo de una mujer que tuvo un problema en la sangre durante 12 años, hasta que tocó el dobladillo de la vestidura de Cristo, y fue sanada inmediatamente y Él dijo, ‘Ve por tu camino, tu fe te ha sanado.’
Aquí hay algo que es más importante y que necesitamos entender desde el punto de vista de un anciano: Que sus oraciones también tienen deben ser la oración de fe. Y si alguien no es sanado, no deberíamos decir inmediatamente ‘tú no tuviste fe’ y acusar a la otra persona. Tal vez fue el anciano quien no tuvo fe, podría ser. Pero noten aquí:
Santiago 5:14: “¿Está alguien enfermo entre ustedes? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren sobre él tras ungirlo con aceite en el nombre del Señor.” La primera vez que leí eso pensé que cuando uno se unge, lo acuestan sobre una mesa, lo cubren con un manto y le derraman todo ese aceite. Pensé, ‘yo no quiero nada que ver en eso,’ pero así no es. Es algo muy simple.
Verso 15: “Y la oración de fe…” ¿Quién va a hacer la oración? ¿Quién va a orar? ¡Es la oración de fe de los ancianos! La persona que viene a pedir, debería tener fe. Pero ¿hay veces en las que Dios sana solamente por la fe del anciano? ¡Sí! Así fue sanado el hombre de Hechos 3, por la fe que tenían Juan y Pedro; fue la fe de ellos. Cuando yo unjo, yo oro y reclamo las promesas de Cristo, porque yo sé que no hay nada que reside en mí que va a hacer que alguien sane—excepto la fe que viene de Cristo. Nosotros no vamos a exigirle a Dios: ‘Dios, Tú tienes que hacer esto; Tú tienes que hacer aquello.’ ¡No! ¡Dios no tiene que hacer nada! Nosotros venimos ante Dios y le pedimos Su gracia y misericordia. Venimos a Dios y reclamamos Sus promesas, a través del sacrificio de Jesucristo. ¡Esa es la oración de fe!
Verso 15: “Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si él ha cometido pecados, ellos le serán perdonados”—porque hay un pecado que no es hacia muerte—esos serán perdonados.
Verso 16: “Confiesen sus faltas unos a otros, y oren unos por otros, para que puedan ser sanados. La súplica de un hombre justo prevalece mucho, siendo efectiva.” Después, él da el ejemplo de Elías, y ¿saben? La oración de Elías no fue algo realmente extenso, ¿O sí? ¿Cuál fue su oración? ¿Recuerdan el desafío entre los profetas de Baal y Elías? Volvamos y veámosla. Las oraciones muy largas no necesariamente cumplen la tarea.
I Reyes 18:17: “Y sucedió cuando Acab vio a Elías, Acab le dijo, ‘¿Eres tú el que inquieta a Israel?’… [¿No es así siempre? El que está causando el problema mira a alguien más y dice, ‘tú lo estás causando.’]…Y él respondió, ‘No he inquietado a Israel, pero tú y la casa de tu padre sí en que han abandonado los mandamientos del SEÑOR, y han seguido a Baalim. Ahora por tanto, envía y reúneme a todo Israel en el Monte Carmelo, y cuatrocientos cincuenta de los profetas de Baal, y cuatrocientos de los profetas de Acera quienes comen en la mesa de Jezabel’” (versos 17-19). Jezabel era la hija del sumo sacerdote de Foenicia—así que él era cananeo, y esto era adoración a Baal. Ella era la esposa de Acab. ¿Eso les causó problemas a todos? ¡Sí!
Verso 20: “Entonces Acab envió a todos los hijos de Israel y reunió a los profetas en el Monte Carmelo. Y Elías vino a todo el pueblo y dijo, ‘¿Cuánto tiempo vacilarán entre dos opiniones diferentes?’…” (Versos 20-21). Eso es lo que está sucediendo ahora.
Cuando usted sostiene dos opiniones, está en mala condición, como dijo Jesús ‘Ningún hombre puede servir a Dios y a Mamon. Nadie puede servir a dos amos. O ama a uno y odia al otro; se adhiere a uno y desprecia al otro.’ No se pueden hacer ambas cosas.
Santiago 1:8: “Él es un hombre de doble ánimo, inestable en todos sus caminos.” Es por eso que Cristo les dijo a los Laodiceanos ‘preferiría que fueran fríos o calientes.’ Dios quiere que usted esté de una manera o de la otra. Él no quiere doble de ánimo. Cuando alguien dice ‘¿Tú estabas involucrado en esto? Y usted dice ¡Yo estoy justo en el medio! Entonces sabe que está en problemas, ¡al instante! Cuando usted se detiene ante dos opiniones, usted es inestable—espiritualmente hablando.
Aquí está la solución, I Reyes 18:21: “‘…Si el SEÑOR es Dios, síganlo. Pero si Baal es Dios, entonces síganlo.’ Y el pueblo no le respondió ni una palabra. Y Elías dijo al pueblo, “Yo, sólo yo… [Handel escribió un oratorio muy bueno para esto. ¿Cuántos de ustedes han escuchado Elías por Handel? Fue lamentable la manera en que la cantó.]…quedo como profeta del SEÑOR. Pero los profetas de Baal son cuatrocientos cincuenta hombres” (versos 21-22).
Ustedes ya saben lo que él hizo. Dijo: ‘Muy bien, hagamos esto: tomaremos un par de bueyes y dejaremos que los profetas de Baal empiecen temprano en la mañana, entonces al mediodía, que lo pongan en el altar—y que hagan todo lo que necesiten.’ Ellos oraron toda la mañana y entonces a mediodía Elías se levantó y dijo, ‘Oigan, tal vez él está dormido; tal vez está de viaje—más vale que griten más fuerte, hagan un poco más de ruido.’ Así que ellos se subieron sobre el altar, saltaron arriba y abajo, se sacaron sangre para tratar de que Baal les respondiera, pero él no respondió. Se lamentaron todo el día (verso 26-29 parafraseado).
Entonces, al momento del sacrificio de la tarde, Elías dijo, ‘Muy bien, construyan el altar, pongan la madera sobre él, pongan al buey sobre él, empápenlo de agua y háganlo de nuevo y una vez más. Aquí, en medio de una sequía, ¡el agua es preciada! (versos 31-35 parafraseado). Ahora, aquí está la oración ferviente de Elías:
Verso 36: “Entonces sucedió a la hora de la ofrenda de la oblación, Elías el profeta se acercó y dijo… [Quiero que noten lo larga que es esta oración. No se trata de la longitud, sino del corazón y de la fe]…‘SEÑOR, el Dios de Abraham, Isaac, y de Israel, sea conocido este día que Tú eres Dios en Israel, y que yo soy Tu siervo, y que he hecho todas estas cosas por Tu palabra. Óyeme, Oh SEÑOR, óyeme, que este pueblo pueda saber que Tú eres el SEÑOR Dios, y que Tú has vuelto sus corazones nuevamente’” (versos 36-37). ¡Eso fue todo! Dios respondió inmediatamente. Bajó fuego y consumió todo. Es por eso que Santiago usa el ejemplo de Elías. Este fue un caso de ‘¡La súplica del justo prevalece mucho!’ Así que, ¡Eso es importante en la sanación!
3) La fe misma de Cristo
Vayamos a Gálatas 2. Es muy importante que entendamos esto porque es una de las claves fundamentales acerca del cristianismo. Sí, tenemos cosas que hacer como leemos en II Pedro 1—‘den toda diligencia para hacer estas cosas’—eso es cierto. Debemos ser diligentes en hacer las cosas necesarias para construir el carácter espiritual.
Gálatas 2:16: “Sabiendo que un hombre no es justificado por obras de ley…” En todo Gálatas, el artículo definido las obras de la ley—ninguno de estos está en el griego. En realidad, es por obras de ley—porque esto da la implicación que se trata de guardar los mandamientos. Si usted está guardando los mandamientos de Dios en fe, ¿Es esa su obra? ¡No!
“…sino a través de la fe de Jesucristo… [Se refiere a la fe de Jesús]…nosotros también hemos creído en Cristo Jesús para que pudiéramos ser justificados por la fe de Cristo…” (Verso 16). ¿Cómo sabe usted que sus pecados son perdonados? Lo sabe porque:
· Usted le cree a Dios
· Usted cree que Jesús es el Salvador
· Usted cree que Él murió por sus pecados
· Usted cree que Él fue resucitado de los muertos
· Usted cree que debe guardar los mandamientos de Dios
· Usted cree que Cristo lo pondrá en buena posición ante Dios—por fe, porque:
o Usted no puede ver a Cristo
o Usted no puede ver a Dios el Padre
o Mas usted cree por fe
“…y no por obras de ley; porque por obras de ley ninguna carne será justificada” (verso 16). No hay nada que usted pueda hacer para perdonar sus propios pecados— ¡excepto arrepentirse! Una vez que hizo algo, ya está hecho. ¿Quién lo va a enmendar? ¡Solamente Dios! Solamente Dios puede enmendarlo.
Verso 17: “Entonces, si estamos buscando ser justificados en Cristo, y nosotros mismos somos encontrados pecadores, ¿es Cristo entonces el ministro de pecado? ¡DE NINGUNA MANERA!... [¡No! La ‘ley del pecado y muerte’ es lo que hace que una persona peque. Cristo no está motivando el pecado.]… Porque si construyo de nuevo aquellas cosas que destruí, me estoy haciendo a mí mismo un transgresor. Porque yo por medio de ley morí para ley, para poder vivir para Dios… [¿Por qué? ‘La paga del pecado—que es la transgresión de la ley—es muerte’]…He sido crucificado con Cristo, aun así vivo. Ciertamente, ya no soy más yo; sino Cristo vive en mí. Porque la vida que estoy ahora viviendo en la carne… [Porque él aún estaba en la carne y esto también es para nosotros ahora]…la vivo por fe—esa misma fe del Hijo de Dios… [¿Qué significa esto en el griego? En el griego significa que él vive espiritualmente por la fe del Hijo mismo de Dios dentro de sí mismo. Por lo tanto, usted llega a tener la fe misma de Cristo dentro de sí. Entonces, se comienza teniendo un cuerpo o conjunto de creencia, en el que usted cree, después viene la fe. Usted está creyendo en Dios y confiando en Él, y ahora es Cristo, ¿Qué está haciendo Él? Confiando en usted, al darle Su fe. ¡Piensen en eso!]…Quien me amó y Se dio a Si mismo por mi” (versos 17-20).
Veámoslo de nuevo. Esto se encuentra en dos lugares: Apocalipsis 13 & 14. Aquí está hablando acerca del tiempo del fin y esta es la paciencia de los santos. Apocalipsis 14:12: “Aquí está la paciencia de los santos; aquí están aquellos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” ¡La fe misma de Jesús! Esa es la clase de fe en la cual debemos crecer. Entonces podremos hacer las cosas de las que Jesús habló, si tenemos ‘fe como una diminuta semilla de mostaza.’
Ahora vayamos Apocalipsis 12:17: “Entonces el dragón estuvo furioso con la mujer y fue a hacer guerra con el resto de su semilla, quienes guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.” El testimonio de Cristo Mismo dentro de ellos. Eso se conecta directamente a la fe, la fe que viene de Cristo estando en nosotros. Esto es en lo que debemos crecer, hermanos.
4) Virtud
Debemos añadirla a nuestra fe y esto es lo que debemos hacer cuando crecemos en este tipo de fe, y este tipo de conocimiento y de entendimiento. Debemos añadirle: ¡virtud! Y la virtud—es usada solamente cuatro veces—significa rectitud moral. Significa vivir bien, o también puede significar que usted tiene una conducta digna de alabanza por Dios, porque es motivada por el Espíritu Santo de Dios. Esto es algo que sucede cuando usted tiene ese tipo de fe viva.
Escrituras citadas:
· II Pedro 2:1, 10, 12
· II Pedro 3:3-4
· II Pedro 2:13-14, 2
· II Pedro 1:1
· I Pedro 1:1
· I Pedro 5:1-3
· II Pedro 1:1-3
· Romanos 1:18-20
· Colosenses 2:8-9
· II Pedro 1:3
· Hebreos 1:1-3
· II Pedro 1:3-4
· I Juan 3:1-3
· Efesios 3:19-20
· II Pedro 1:4
· Juan 1:1-4,14
· II Pedro 1:5-7
· Gálatas 5:22-23
· Romanos 1:5
· Efesios 4:4-5
· Colosenses 2:6-7
· II Corintios 13:5
· Romanos 1:8, 17
· Romanos 4:1-3
· I Corintios 2:1-5
· Lucas 17: 5-10
· Mateo 17:14-21
· Hechos 3:2-9, 12-16
· Marcos 11:20-23, 25-26
· Mateo 5:23-24, 43-46
· Mateo 6:9-12
· Marcos 2:1-12
· Santiago 5:14-16
· I Reyes 18:17-21
· Santiago 1:8
· I Reyes 18:21-22, 26-29, 31-37
· Gálatas 2:16-20
· Apocalipsis 14:12
· Apocalipsis 12:17
Escrituras mencionadas, no citadas:
· Romanos 8
· Mateo 20
· Gálatas 2
· Juan 21
· Efesios 1:13
· II Corintios 1:22
· Lucas 18:8
· Zacarías 15
· Hechos 3
También citados: Libro:
· Luz por Luz por John Goodenough
· La Biblia Ginebra